Escondido en una zona boscosa, entre las avenidas Venezuela y
Boyacá de la urbanización El Rosal, el
parque Boyacá es un sitio de encuentro para un público
variado que se da cita para disfrutar el verdor de sus jardines, las sombras de
sus árboles y sus amplias caminerías. Un espacio que, hasta hace menos de una
década, era guarida de indigentes; ahora es una solución de esparcimiento en el
municipio Chacao.
“Huele a verde”, asegura Soledad Serrano, una
usuaria, quien viene al menos dos veces por semana, desde su casa en la
urbanización Los Palos Grandes. “Cuando el congestionamiento del tráfico se
apodera de la ciudad, no dudo en hacer un alto y venir directo a este parque.
Si existe el cielo, debe ser muy similar a este sitio”, recalcó.
El lugar cuenta con árboles
centenarios, el sonido cómplice de numerosas aves e
instalaciones en buen estado. “Los domingos traigo a mi madre, quien ya tiene
88 años de edad”, agregó Soledad, mientras recordaba que tal experiencia le
trajo a la mente la paz que se respira en el páramo merideño de donde es
oriunda. “Esto es una delicia”, remató.
El Parque
Boyacá funciona
de lunes a sábado, entre las 6 am y las 9 pm, mientras que los domingos el horario es de
6 de la mañana hasta las 6 de la tarde. Cada semana, se realizan clases de bailoterapia y yoga, generalmente
en las mañanas o los domingos. Los niños cuentan con un exclusivo espacio de
juego ubicado en el centro del lugar, cuyo único requisito para su uso es no
sobrepasasar la edad de 8 años.
Fuente: Tu Zona Caracas |
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